Hoy en día, tenemos tantos datos a disposición que utilizamos en el día a día. Contraseñas, información confidencial… la realidad es que todo esto forma parte del ecosistema digital. Más allá de lo útil que puede ser tenerlos a mano, también hay que tener precauciones. Pues el robo de datos es una de las mayores amenazas actualmente, tanto para individuos como para empresas.
A continuación, te explicamos qué es, cómo ocurre y qué medidas puedes tomar para proteger tus transacciones financieras digitales.
¿Qué se entiende por robo de datos? ¿Cómo ocurre?
Se trata del acceso no autorizado a información confidencial con el objetivo de utilizarla de manera fraudulenta. En otras palabras, es el equivalente a un hurto, pero en la vida “digital”. Este delito puede ocurrir de diversas maneras, incluyendo:
- Ataques de malware: software malicioso diseñado para infiltrarse en dispositivos y robar información personal.
- Phishing: estrategia de engaño donde los ciberdelincuentes se hacen pasar por entidades confiables para obtener datos sensibles.
- Intercepción de redes no seguras: conexiones públicas o desprotegidas pueden ser vulnerables al robo de credenciales y otros datos.
- Filtraciones de bases de datos: cuando una empresa sufre un ataque, la información de sus clientes puede quedar expuesta en la web.
Entre los datos más vulnerables se encuentran:
Robo de datos en transacciones financieras digitales
Esto es especialmente peligroso cuando se trata de transacciones financieras en línea. Con el auge del comercio digital y los servicios financieros por internet, los delincuentes buscan constantemente nuevas formas de interceptar información y cometer fraudes.
Algunas de las prácticas más comunes incluyen:
- Ataques de “man-in-the-middle“: ocurren cuando un hacker intercepta la comunicación entre el usuario y la entidad financiera, robando credenciales o alterando transacciones.
- Clonación de tarjetas virtuales: mediante malware o sitios web falsos, los ciberdelincuentes pueden obtener los datos de pago y usarlos sin autorización.
- Uso de aplicaciones falsas: algunas apps imitan servicios legítimos para engañar a los usuarios y robar sus credenciales.
Frente a estos riesgos, es fundamental tomar medidas para garantizar la seguridad de la información en cada operación financiera.
¡Protégete del robo de datos en línea con estos consejos!
Para evitar caer víctima de fraudes financieros y garantizar la protección de tus datos personales, sigue estas recomendaciones:
1. Usa contraseñas seguras y gestores de contraseñas
Evita contraseñas obvias o reutilizadas en varias cuentas. Esto facilita el acceso de los ciberdelincuentes a tu información. Usa combinaciones de letras mayúsculas y minúsculas, números y caracteres especiales para aumentar su complejidad.
Un gestor de contraseñas puede ayudarte a generar y almacenar claves seguras sin riesgo de olvido, además de recordarte cambiarlas periódicamente para una mayor seguridad. También es recomendable evitar escribirlas en notas físicas o digitales sin protección. Así tomas precauciones del robo de datos.
2. Habilita la autenticación en dos factores (2FA)
El 2FA añade una capa extra de seguridad al requerir un código adicional para acceder a tus cuentas. Así, se dificulta el acceso de ciberdelincuentes, aunque tengan tu contraseña. Este código suele enviarse a tu teléfono móvil o generarse en una aplicación de autenticación, evitando que alguien más pueda acceder sin tu autorización.
Activar esta función en bancos, correos electrónicos y plataformas de pago digital reduce significativamente el riesgo de fraude.
3. Evita el robo de datos: no uses redes públicas
No realices pagos ni inicies sesión en servicios financieros desde redes Wi-Fi abiertas, ya que pueden ser vulnerables a ataques de hackers. Estas redes pueden ser manipuladas para interceptar información confidencial sin que el usuario lo note.
Si es necesario usarlas, emplea una VPN para cifrar tu conexión y dificultar el acceso a tus datos. También es recomendable desactivar la conexión automática a redes Wi-Fi y usar datos móviles para transacciones sensibles. Así puedes evitar el robo de datos.
4. Verifica la autenticidad de los sitios web
Antes de ingresar datos personales o financieros, revisa que la URL tenga “https://” y un candado de seguridad, lo que indica que la conexión está cifrada. Desconfía de sitios que luzcan sospechosos o mal diseñados, ya que pueden ser páginas falsas creadas para robar información.
Siempre accede a plataformas bancarias y de comercio digital escribiendo la dirección web directamente en el navegador, en lugar de hacerlo desde enlaces recibidos por correo o mensajes.
5. Desconfía de correos o mensajes sospechosos
Los fraudes financieros a menudo comienzan con correos electrónicos o mensajes falsos que intentan engañarte para que reveles información confidencial. ¡Así ocurre el robo de datos! Estos mensajes pueden parecer legítimos, con logotipos y lenguaje similar al de empresas reales, pero suelen contener errores ortográficos o enlaces sospechosos.
Nunca hagas clic en enlaces de remitentes desconocidos ni compartas tus credenciales por correo o chat. Si tienes dudas, comunícate directamente con la entidad a través de sus canales oficiales.
6. Mantén tus dispositivos actualizados
Las actualizaciones de software no solo incluyen mejoras de rendimiento, sino también parches de seguridad que protegen contra nuevas amenazas. Los ciberdelincuentes buscan constantemente vulnerabilidades en los sistemas, y las empresas desarrolladoras lanzan actualizaciones para corregirlas.
Asegúrate de mantener tu sistema operativo y aplicaciones al día, especialmente en dispositivos donde realizas operaciones financieras. Además, evita descargar programas de fuentes no confiables, ya que pueden contener malware.
7. Usa soluciones para evitar el robo de datos
Instala un antivirus y activa las herramientas de protección contra malware en todos tus dispositivos, ya que muchos ataques comienzan con programas espía que recopilan información sin que lo notes. También puedes usar servicios financieros que prioricen la seguridad de la información, como plataformas con encriptación de extremo a extremo y monitoreo de transacciones.
Evita instalar aplicaciones bancarias o financieras desde fuentes desconocidas y revisa regularmente tus movimientos para detectar cualquier actividad sospechosa.
Mantente protegido del robo de datos y asegura tus finanzas
El robo de tu información es una amenaza real, pero con las precauciones adecuadas puedes protegerte y evitar fraudes financieros. La clave está en adoptar hábitos digitales seguros y estar alerta ante posibles ataques.
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Referencias Bibliográficas
- Klusaité, L. (2022, 31 de enero). ¿Qué es el robo de datos? NordVPN.
- Muncaster, P. (2022, 1 de julio). 5 formas que utilizan para robar datos de tarjetas de crédito. We Live Security.
- Salsiduri, S. (2022, 26 de julio). Robo de datos de tarjetas de crédito: las 5 formas más comunes y cómo protegerse. Clarín.
- UNIR (2023, 20 de febrero). El robo de la identidad digital: tipos y legislación vigente.
